Los embalses del Duero pierden agua almacenada por primera vez en varias semanas y se quedan al 69,5% de su capacidad

Así, los embalses del Duero acumulan 5.215 hectómetros cúbicos (hm3), de una capacidad total de 7.507 hm3, lo que representa un 69,7 por ciento, 0,2 puntos menos que hace una semana cuando las reservas eran de 5.232 hm3, un 69,7 por ciento, en lo que supone la primera caída del agua embalsada desde hace varias semanas.

La cifra de la última actualización es también más elevada que la que se registraba hace un año, con 4.116 hm3, aunque sigue por debajo de la media de los últimos diez años (5.716 hm3).

La reserva hídrica española ha perdido esta semana 224 hectómetros cúbicos, lo que representa el 0,4 por ciento, y se sitúan en el 51,2 por ciento de su capacidad total, según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, que señala que esta semana los embalses españoles tienen 28.665 hectómetros cúbicos de agua.

De ellos, 16.754 hectómetros cúbicos están reservados a usos consuntivos, lo que reduce la reserva de agua para consumo humano y riego al 43,33 por ciento de su capacidad. Se trata de un volumen algo menor que los 17.292 hectómetros cúbicos de agua embalsada para usos consuntivos que había en las mismas fechas de hace un año.

Mientras, los 12.135 hectómetros cúbicos restantes están destinados a embalses de producción de energía hidroeléctrica, por lo que la reserva en este ámbito está al 69,72 por ciento de su capacidad, frente al 53,48 por ciento en el que estaban hace un año, cuando guardaban 9.324 hectómetros cúbicos.

Esta semana las precipitaciones fueron nulas en la vertiente Mediterránea y prácticamente nulas en la vertiente Atlántica y la máxima se ha recogido en Mahón, con 9,4 litros por metro cuadrado.

Por ámbitos, la reserva se encuentra al 83,6 por ciento en Cantábrico Oriental; al 78,8 por ciento en Cantábrico Occidental; al 77,6 por ciento en Miño-Sil; al 83,3 por ciento, Galicia Costa; al 81 por ciento, las cuencas internas del País Vasco; al 69,5 por ciento, el Duero; al 62,1 por ciento, el Tajo; al 69 por ciento, Tinto, Odiel y Piedras; al 61,3 por ciento, el Júcar y al 56,8 por ciento, el Ebro.

Sin embargo, se encuentran por debajo de la mitad de su capacidad total los embalses de las cuencas del Guadiana, que está al 34,4 por ciento; Guadalete-Barbate, al 28,9 por ciento; Guadalquivir, que está al 25,6 por ciento; la cuenca Mediterránea Andaluza, que está al 37,2 por ciento; Segura, al 35,3 por ciento y las cuencas internas de Cataluña, al 26,7 por ciento.

En estos momentos, los embalses guardan un 23,45 por ciento menos agua que la media de los últimos diez años pero se sitúan un 6,38 por ciento por encima del volumen de agua almacenada hace un año, cuando tenían 26.834 hectómetros cúbicos.

Excepto en 2022, cuando estaban al 47,80 por ciento de su capacidad total en la 15 semana del año, hay que remontarse 15 años, hasta 2008, para encontrar una cifra más baja que esta. Entonces, los embalses estaban al 47,58 por ciento de su capacidad total.

El anterior periodo con unas reservas de agua embalsada tan reducidas es el comprendido entre 1992 y 1995, cuando en esta misma semana, los embalses estaban al 44,46 por ciento (1992); al 42,26 por ciento (1993); al 49,93 por ciento (1994) y al 42,45 por ciento (1995).