Los tres filtros de Sócrates contra los paisanos que en los bares hacen correr mentiras
Sin que sirva de precedente hoy dedicaremos unas líneas a todos esos cotidianos de las barras de los bares que se ocupan, mientras aparentan hojear el periódico, a poner en marcha ventiladores para escampar toda la mierda que pueden. Son uno de nuestros cánceres que laboran en la destrucción de todo lo bueno que podemos ofrecer y no damos mientras procuran impedir que los demás construyan. Pasean como si tal cosa a nuestro alrededor como almas cándidas y bondadosa, pero no, no se equivoquen. Son lo peor de lo peor. Para no perder coma contaremos una historia tan antigua como válida para nuestros días.
Opinion06 de febrero de 2024 RML