La Asociación para el Desarrollo Sostenible de la Montaña del Porma demanda que se reconsidere el actual proyecto de Estación Náutica del Porma

Su propuesta inicial era constituir una mancomunidad de municipios para capitalizar el proyecto y que estuviera formada por los Ayuntamientos de Boñar, Reyero y Puebla de Lillo. Estos municipios serían los responsables de asumir los costes que no se alcanzaran a partir de las posibles ayudas de instituciones superiores, más allá del ámbito local.

Tras las primeras reuniones con los ayuntamientos encabezada por Boñar, las discrepancias aparecieron en la base del proyecto que desde la institución local se enfocó en la zona de Valdehuesa, en lugar de la propuesta de esta agrupación que lo hacía prácticamente en un 90% por Lodares.

En este punto, la visión del objetivo dejaba tras sí un planteamiento diametralmente distinto a ambos lados de la mesa. Por su parte, el resto de los ayuntamientos implicados (según esta asociación) eran favorables tanto a la idea de la mancomunidad como a la propuesta de Lodares, aunque con matices. 

Precisamente estos matices, según el ayuntamiento boñarense, hacen que la realidad sea muy distinta a la ponderada por la asociación ya que tácitamente, el resto de los municipios derivaban la responsabilidad sobre la opción que tomara el Ayuntamiento de Boñar, asumiendo sus decisiones como propias. Con ello y dadas estas circunstancias, la creación de una mancomunidad específica “ad hoc” para esta cuestión no era, ni es una opción para el gobierno de Boñar. 

Sobre la cuestión presupuestaria, las valoraciones son muy distintas del proyecto de esta asociación al municipal de Boñar. Desde el Ayuntamiento se propone una partida formada por 900.000 euros divididos entre la zona de Lodares y Valdehuesa. Por el contrario, el proyecto que plantea la asociación define 1.282.474 euros solo en Lodares con lo imprescindible para desarrollar el turismo de los deportes náuticos, con cincuenta y ocho aparcamientos al lado de la carretera, una edificación polivalente con locales para empresas de deportes náuticos, vestuarios, aseos, administración, bar restaurante, rampa hormigonada para botadura y pantalanes con pasarela deslizante que se mueve si va bajando el agua, lo imprescindible para arrancar el proyecto y conseguir un revulsivo importante para Lodares y, también para Valdehuesa.

La diferencia fundamental entre un proyecto y el otro (según la asociación), es que el que plantean desde el ayuntamiento de Boñar va a servir única y exclusivamente los meses de verano, con una construcción pequeña enfocada a ser un chiringuito que acabará muy seguramente cerrado como el de Valdehuesa y el proyecto de la asociación está enfocado a que durante todo el año se pueda mover el turismo en el pantano, con instalaciones amplias y polivalentes que permitan su explotación todo el año como bar y restaurante así como alquiler de embarcaciones, es la diferencia entre que se pueda desestacionalizar el turismo en la zona o que se siga enfocado a dos meses de buen tiempo al año y chiringuitos que cada vez es más difícil conseguir a alguien que quiera trabajarlos por ser algo tan absolutamente temporal.

Por su parte y al respecto del proyecto presentado por la Asociación, el Ayuntamiento no ve realistas las cifras que aparecen en el presupuesto que considera distan mucho de los costes finales que supone cada uno de los elementos que desarrolla. 

En cualquiera de las dos opciones planteadas se echa a faltar un plan de empresa consistente que permita justificar las operaciones de ambas propuestas. La ausencia de él es una de las principales causas de fiasco de multitud de propuestas económicas financiadas a lo largo y ancho del territorio que al final, pasan a convertirse en monumentos al despilfarro de las débiles economías rurales. Algo tan sencillo como esto y que se demanda a cualquier empresa o autónomo a la hora de desarrollar un proyecto personal pasa a no ser de obligado cumplimiento cuando hablamos de inversión en obra pública. Así terminan las cosas como terminan, si es que alguna vez se terminan. 

No obstante, y a partir de todo lo planteado, hemos querido preguntar al alcalde de Boñar Pepe Villa sobre diferentes dudas surgidas a partir de esta cuestión.

¿Cuáles son las razones que no han permitido un acuerdo para plantear el proyecto de Base Náutica del Porma en Lodares? Son económicas, logísticas, políticas…

Pepe Villa:

“En absoluto, nunca nos hemos opuesto a propuestas coherentes. La realidad de la gestión de las partidas en ayudas y subvenciones nos condiciona a la hora de planificar cada proyecto. En éste, como en otros casos, el Ayuntamiento ha de ser sensible a multitud de proyectos a los que también ha de prestar atención y dirigir esfuerzos para que se cumplan en paralelo, unos y otros. Más allá de lo deseable, los procedimientos legales nos ponen trabas infranqueables que no son solo económicas. En este caso hay muchos organismos con capacidad de trabar su desarrollo. Lo razonable es asumir que cuestiones de gran calado económico han de replantearse en la medida de que podamos acceder a cuantías económicas en tiempo y forma que nos faciliten su realización por fases de una manera realista. Otra cosa es fantasear con lo que nos gustaría y que no está para nada en la realidad cotidiana a la que nos tenemos que enfrentar”. 

La falta de mancomunidades en el territorio impide el desarrollo económico de multitud de proyectos que terminan por quedar grandes a los ayuntamientos. ¿Por qué está en contra de la Mancomunidad propuesta por esta asociación?

Pepe Villa: 

“Nunca hemos estado en contra de mancomunar los pueblos que tanto por proximidad como por compartir problemáticas son afines. Pero tampoco estamos por crear un proyecto mancomunado a la carta solo para una cuestión específica. Eso no tiene justificación posible en ninguna institución. Mucho más cuando tus posibles socios en ese proyecto no están por asumir la estructura, el volumen de trabajo y la responsabilidad que supone crear un organismo de este calado”. 

Existen voces que se manifiestan ante la pérdida de oportunidades por la inacción de los responsables políticos. ¿Qué plan de acción permite mantener que el camino correcto es el que defiende usted?

Pepe Villa:

“Quién asume una responsabilidad en una institución ha de saber que tiene que tomar decisiones y con ellas la posibilidad tanto de acertar como de equivocarse. Nunca cerramos la puerta a propuestas con posibilidad de realización. Algunos pueden pensar que es perder el tiempo. Nosotros creemos que es bueno perder tiempo en asumir el riesgo de acertar y también el de cometer errores. Sobre todo, para no repetirlos con cuestiones que no se podrán sostener en el tiempo con nuestros propios y más que limitados medios”.

El hecho de que existan asociaciones para el desarrollo económico del territorio, ¿no le está diciendo que desde las instituciones locales no se está cubriendo esta necesidad? 

Pepe Villa

“Es muy probable que tenga que ver más con una costumbre que con la realidad de la economía global a la que todos nos vemos expuestos. Es un asunto que tenemos que poner sobre la mesa para adaptar las estructuras de gobierno local a un modelo más actual que nos permita trabajar en estas cuestiones con una efectividad que ahora mismo no estamos alcanzando. Una concejalía más técnica y enfocada en exclusividad a esta tarea es probablemente el primer paso de esta adaptación”.

DESARROLLO TURISTICO DEL PANTANO DEL PORMA.pdf

MV BASE NÁUTICA DE LODARES EN EL -MAR DEL PORMA- (LEÓN).pdf