UPL denuncia que la Junta pretende convertir León en el "basurero industrial de media España”

Unión del Pueblo Leonés (UPL) denunció hoy que la Junta de Castilla y León pretende convertir a la provincia de León en “el basurero industrial de media España”, al tiempo que se opuso “frontalmente” al proyecto de macrovertedero en la localidad de San Justo de la Vega, que fue elevado a Proyecto Regional, lo que implica su utilidad pública e interés social y habilita la expropiación urgente de los terrenos necesarios.
Los leonesistas explicaron que actualmente esa zona de la comarca de la Maragatería cuenta con una instalación de tratamiento de residuos operativa como es el Centro de Tratamiento de Residuos de San Román de la Vega. A ella habría que sumar en el futuro este proyecto de San Justo y el de la Planta de Tratamiento y Valorización de Residuos Orgánicos que se pretende colocar en Santiago Millas.
“La concentración de proyectos de tanta capacidad y tan diversos en una sola zona geográfica muy delimitada y cercana al Conjunto Histórico de Astorga y al Camino de Santiago, Patrimonio de la Humanidad por la Unesco desde 1993, hace que la situación de la comarca y de la provincia sea particularmente notable y controvertida a este respecto”, advirtieron.
Este sentido, UPL recordó que los informes técnicos internos de la Junta señalaron que el proyecto estaba sobredimensionado, ya que la capacidad total prevista, de hasta cuatro o cinco millones de toneladas de residuos industriales, es “desproporcionada" para las necesidades de generación de residuos industriales de la Comunidad.
Además, señaló que, tras el primer informe desfavorable del propio Servicio de Residuos de la Junta, a finales de 2023, “el promotor modificó el proyecto y eliminó del mismo el vertedero de residuos de construcción, manteniendo los dos macrovertederos de residuos industriales y peligrosos con su capacidad original inalterada”.
Tal y como trasladaron, la ubicación se encuentra entre dos arroyos, el Valle de la Calzada y Las Rozas, y “lo que todavía es más grave”, sobre el acuífero detrítico terciario del Tuerto-Esla. Así, la alta permeabilidad del terreno, denunciada en el periodo de alegaciones por entidades ecologistas, “supone un riesgo evidente de contaminación de aguas superficiales y subterráneas”.
Por otra parte, el proyecto incluye un vaso con capacidad de vertido para hasta un millón de toneladas de residuos peligrosos durante 15 años, que incluyen cenizas, lodos industriales o posibles restos de amianto, lo que “supone una amenaza para la salud pública de San Justo y las localidades vecinas”. Por ello, en estos momentos, el proyecto se encuentra bajo un recurso contencioso-administrativo debido a la falta de justificación del Proyecto Regional y el alto riesgo de contaminación ambiental.
Por todo ello, UPL exigió hoy a la Junta y a su consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que explique “dónde está la utilidad pública de convertir a La Maragatería en un polo de concentración de residuos peligrosos”. En el mismo sentido, recordó a Suárez-Quiñones que León “no es el sumidero de nadie” y que su obligación es “proteger el medio rural”, aunque con los incendios del pasado agosto “haya podido quedar claro que su intención es exactamente la contraria”.
Del mismo modo, instó al Ayuntamiento de Astorga a que “no haga oídos sordos a la situación” y se posicione acerca de dos proyectos “tan cercanos a la ciudad” y que, de salir adelante, “convertirán la zona en uno de los polos de concentración de residuos con mayor densidad del país”.