El ingeniero jefe de Tabliza insiste en que no hubo "nada anormal" antes del accidente minero de León

Toribio ha explicado que realizaba "consultas diarias" a lo libros de registro de control ambiental y de comunicación entre vigilante y que, "por escrito", no tenía "ninguna comunicación de ninguna anomalía" y que los valores de metano dentro de la explotación "no eran anormales".
En su declaración, en la que ha ahondado en aspectos técnicos, ha hecho referencia a varias cuestiones relacionadas con los sistemas de ventilación, con los "tiros" hacia las bóvedas o con los sistemas y protocolos de seguridad, a preguntas del fiscal y de los abogados de la acusación.
El ingeniero jefe ha insistido en que en ningún momento se actuó en la explotación minera de forma diferente a lo dispuesto en las Instrucciones Técnicas Complementarias (ITC) y en la Disposición Interna de Seguridad (DIS) y que en ningún momento se advirtió de niveles extraordinariamente altos de metano.
Es más, David Toribio ha asegurad que en los libros de control de la explotación minera en las fechas previas al accidente en el que perdieron la vida los seis trabajadores, "aparece siempre la palabra normal y todo bien", por lo que "en ningún momento hubo un indicio de que eso ocurriera", en referencia al siniestro.
RESCATE
Además, ha explicado que los mineros no eran quienes debían realizar las tareas de rescate en el caso de accidente, si no la brigada destinada al efecto, por lo que el hecho de que en el accidente murieran los seis mineros fue un "acto voluntario" y de "humanidad". "Así lo hubiera hecho yo si hubiera estado ahí", ha afirmado.
En este sentido, ha comentado que los llamados auto rescatadores, unos sistemas que proporcionan oxigeno durante 30 minutos en actividad y hasta cien minutos parado, no es un sistema "para rescatar a nadie" si no para que cada uno de ellos pudiera "salir de una situación peligrosa".
Del mismo modo que anteriores comparecientes que han prestado declaración como acusados, el ingeniero jefe se ha reafirmado en que el accidente fue "impredecible e inevible2 y que no se habían recibido en ningún momento quejas de los trabajadores por cuestiones relacionadas a la falta de seguridad en la mina.